Ya están funcionando en veterinaria varias empresas que ofrecen una interpretación automatizada de radiografías así como un informe de las mismas para el cliente. En este caso el problema está en que el informe se emite en inglés, lo que impide la entrega inmediata al cliente, debiendo traducirlo previamente el veterinario.
El precio varía entre empresas, con algunas que ofrecen una suscripción mensual y otras que también permiten comprar paquetes de radiografías.
La eficacia de estas empresas dependerá del aprendizaje de patrones que hayan conseguido construir con IA. Pero es inevitable pensar que este tipo de software sustituirá progresivamente a la interpretación realizada por veterinarios toda vez que, en varios estudios se ha demostrado ya la variabilidad de la interpretación realizada por expertos radiólogos sobre la misma radiografía.
Podéis ver más sobre estas empresas aquí:
